Brindis


Hace unas semanas estuve en la Feria de Benicàssim, un lugar precioso que os recomiendo mucho si os gusta pasear por la playa, y participé en dos mesas: una en calidad de traductora y otra como autora. En las dos me lo pasé muy bien y aprendí muchísimo, en especial en la primera gracias a las personas que estaban conmigo. En la segunda hablé de «La partitura. Música para Adam» y después me lié y no sé cómo acabamos hablando de las redes sociales y de lo torpe que me siento utilizándolas. Tras hablar de la mejor forma de preparar gazpacho llegamos aquí, al blog.

Abrí el blog hace años porque a veces se me ocurren ideas o necesito expresar mi opinión o mi preocupación sobre algo y Facebook o Twitter o Instagram no me parecen el mejor lugar para escribir cuatro párrafos. En Facebook queda raro, en Twitter no se puede y en Instagram te falla la aplicación (lo he intentado). Por eso empecé Librianna y como curiosidad os diré que fue una decisión tan improvisada y del momento que no se me ocurrió comprobar si el nombre tenía algún problema -es obvio que es Libros y Anna- y resulta que Librianna, escrito igual, es el título de una película «para adultos» rusa de 1969 que tiene como subtítulo «Librianna, bitch of the Black Sea». En serio. Ya he confesado mi gran metedura de pata. Cuando me di cuenta, durante un segundo me planteé cambiarlo, pero le había cogido cariño al nombre y en el fondo es una anécdota divertida y me recuerda que no debo tomarme demasiado en serio.

Lo cierto es que me gusta mucho escribir por aquí, me permite mostrar otra parte de mí y en cierto modo me ayuda a conoceros mejor, algo que siempre me hace muy feliz. El problema es que soy un desastre actualizando el blog y que la gran mayoría de veces que me propongo hacerlo con más frecuencia no sé qué hilo conductor elegir. Sí, puedo hablar de libros, pero cómo, o del proceso de escritura o, como sugirió alguien en Benicàssim, de mi receta de gazpacho. Mi receta es la de la Termomix y siempre que alguien habla de gazpacho en mi mente veo la escena de «Mujeres al borde de un ataque de nervios», así que no me parecería correcto hablaros de eso por aquí porque ese momento es insuperable.

Pero en medio de la vorágine de estos días, del caos que reina en mi escritorio por toda la documentación, esquemas y fichas de la nueva novela y también en mi vida porque cuando estoy escribiendo así el mundo desaparece, tuve una idea. Mejor dicho, robé una idea de mis hijas.

Agata y Olivia hacen preguntas raras, como todos los niños me imagino, pero dado que ellas son las únicas que tengo yo para experimentar no estoy segura de si los demás también lo hacen. Sus preguntas no solo son estrafalarias, sino que van de un tema a otro y siempre esperan que M o yo sepamos la respuesta. Y lo curioso es que yo muchas veces la sé y es porque lo he leído en un libro o bien lo he traducido (si llega el Apocalipsis soy una buena persona para tener en vuestro bando). Pues bien, he decidido que elegiré una de estas preguntas o palabras que A y O me lanzan al aire para escribir un post, artículo o desvarío de vez en cuando a ver si os gusta. Diría que lo haré cada semana, pero de momento solo puedo decir que lo intentaré.

Y la palabra de hoy es: BRINDIS.

He elegido esta palabra porque es perfecta para daros las gracias por acordaros de mi cumpleaños y felicitarme. Pasé el día escribiendo, peleándome con un capítulo, y después fuimos a cenar. Fue un gran día, gracias por pensar en mí, ojalá pudiera brindar con todos vosotros en el mundo real ♥

Dado que yo no sé hacerme fotos y siempre quedo fatal, elijo esta de la increíble Marilyn Monroe cuya carrera profesional y vida personal siempre me han fascinado.

Marylin Monroe

Brindis. La pregunta de mis hijas era exactamente: ¿quién se inventó el brindis?

El origen del brindis se remonta al siglo IV antes de Cristo, en la antigua Roma era habitual envenenar a tus enemigos (y a tus amigos) con la bebida, así que si estabas en una fiesta o en una bacanal y querías brindar chocabas tu copa con la del resto de invitados con una fuerza considerable para que el líquido salpicase y acabase mezclándose con el de las otras personas. Era una manera de demostrar tu confianza y ofrecerla a los demás.

Spartacus. Sangre y arena. Serie de televisión.

Si habéis llegado hasta aquí seguro que os preguntáis a qué viene esto y qué tiene que ver conmigo, pues tiene que ver con libros, como no.

Libros con brindis y que os recomiendo (y que es de donde probablemente aprendí esta información):

«Las viñas de Napa Valley» de Nora Roberts: un clásico de la autora, una de sus novelas más redondas, en mi opinión. Romántica contemporánea con varias historias del tipo «saga familiar». Muy recomendable para el verano.

«The Bourbon kings» de J.R. Ward: es la Ward y es el primero de una serie que no está traducida al español. Esta autora o te gusta o la odias. Novela contemporánea, un poco «culebrera», una protagonista discutible, un final de infarto y engancha.

«El embrujo del merlot» de Lisa Dickenson: romántica contemporánea, muy cortita y de esas que te dejan con una sonrisa. La acción transcurre en Italia, así que tienes la sensación de viajar, y tiene diálogos muy divertidos.

«Hasta arriba» de W.E. Bowman: un clásico del humor británico. Un grupo de alpinistas de lo más peculiar que suben una montaña cargados con botellas de champán. Un libro muy original en cuanto a trama pues mezcla a la vez la novela de humor con la de aventuras.

«Estirpe» de Marcello Fois: la historia de una familia en Cerdeña, empieza a finales del siglo XIX cuando el primer protagonista es herrero y sigue hasta la primera guerra mundial cuando son propietarios de un viñedo. Creo que es la primera novela de una serie sobre la familia Chironi, pero de momento el resto no están traducidas.

Por último, hago un poco de spam y os recomiendo una de mis novelas donde aparecen un brindis o dos. Las reglas del juego. Podéis comprar la novela en ebook o en papel, pero yo lo haría en papel porque tiene una sorpresa al final.

Este es el párrafo con el brindis:

«La cena llegó a su final y la mano de Kelly apareció repentinamente en su muslo por debajo del mantel. Él tardó un segundo en asimilar las intenciones de su compañera de mesa y cuando lo hizo comprobó que su cuerpo se negaba a reaccionar. Joder, estaba más cansado de lo que creía. Y si la rubia seguía levantando la mano hacia el interior de sus muslos, no tardaría en darse cuenta. Y esa sí que era una humillación que no estaba dispuesto a soportar esa noche.

-Un brindis -dijo cogiendo la copa mientras se ponía en pie-. Por los Giants, los jodidos cretinos que nos han robado la Super Bowl.

Tim lo miró y enarcó una ceja y Mac se limitó a encogerse de hombros y a mirar de reojo a Kelly.

-Por los Giants, unos jodidos cretinos -lo secundó Tim, y acto seguido el resto de ocupantes de su mesa, y del salón, lo imitaron. Igual que Kelly, que no tuvo más remedio que apartar la mano de la entrepierna de Mac.

Suspiró aliviado, aunque la tranquilidad le duró poco porque notó que Pantalones de Acero lo fulminaba con la mirada. ¿Por qué? ¿Por qué no podía respirar de repente? Maldita fuera. Susan y toda esa gente podían irse al infierno. Literalmente.»

Me despido, espero que os haya gustado este post y que os apetezca que escriba más de este tipo. Si queréis sugerir alguna palabra como tema para el próximo, hacedlo en los comentarios. Y si no le veis ningún sentido a esta locura, no os cortéis y decidlo también. Besos ♥

 

 


11 respuestas a “Brindis”

  1. Eres genial , me encantan todos tus libros , ahora estoy con La Partitura , y otro que me tiene atrapada desde el libro uno , que como tarde mucho en salir el último , me va a dar algo ( tú ya sabes ) . Un beso feliz verano

    Me gusta

    • ¡Muchísimas gracias Nieves! Qué ilusión que La Partitura te esté gustando, gracias por leerla. Estoy haciendo todo lo posible para que la próxima novela tarde poco. Un beso fuerte y feliz verano para ti también :-*

      Me gusta

  2. Hola!!!
    Ostras, que origen más curioso, por decirlo suavemente, para algo que se hace con los mejores deseos, no?
    Me encantarán estas nuevas entradas 😉
    Un besote de los grandes

    Me gusta

    • ¡Hola, Pepa! Muchas gracias por pasarte por aquí y por el voto de confianza. No sé si tú leías «Asterix» de pequeña (o de mayor), yo sí, y cuando escribía el post no podía dejar de pensar en Asterix y Obelix cuando dicen, en cada una de sus historias, «están locos estos romanos». Besos 🙂

      Me gusta

  3. Leerte, cuentes lo que cuentes, siempre es un placer.

    Lo del brindis, más que confianza, parece lealtad, ¿no? Estás en una fiesta loca de aquellas que se montaban los romanos y resulta que a tu amigo lo quieren envenenar. Le han echado algo en la copa y brindáis todos los del grupo. Al chocar, cae veneno de la copa de tu amigo en la tuya y en la de algunos de los demás, ¡todos muertos!

    Me veo diciendo «no es que no me fíe de ti, Fulanitus de Talicus, pero tienes muchos enemigos y de ellos no me fío nada».

    Y de spam nada, quien no conozca a Huracán Mac ¡ya está tardando!

    Me gusta

  4. Me encantas como escritora y con algunas anotaciones de tu vida en este blog me encantas como persona.Podrias comentar cosas q te pasan en tu día a día en el trabajo ,con tus amigos y con tu familia y descubrirnos libros q te gusten o te hayan marcado. Y me acuerdo perfectamente de esa escena de tu libro pero no pensé nada sobre el brindis sino sobre cómo sobrevivir a una mano q no es la q deseas q esté justamente ahí.Muchos besos.Y me Asusté cuando desapareciste y no publicabas nada.Cuentanos q pasó.

    Me gusta

    • Muchísimas gracias, Rosa.
      La verdad es que mi «desaparición» tiene poco de misterio, estoy escribiendo muchísimo y me pasan los días (y las semanas y los meses) sin que me dé cuenta de nada. Ojalá pronto pueda contarte más y tú quieras seguir leyéndome. Un beso fuerte.

      Me gusta

  5. Buenísima idea y muy buenas recomendaciones (algunas ya las he leído y otras me las apunto), pero sobre todo, no nos dejes tanto tiempo esperando. Casi salto de la silla en el trabajo cuando he visto que había un artículo nuevo. Eres estupenda. Sigue así, porfa.

    Me gusta

Deja un comentario

Crea una web o blog en WordPress.com